Hincha de Millonarios se roba una silla del estadio y la policía lo tuvo que seguir

Millonarios e Independiente Santa Fe jugaron una nueva edición del clásico capitalino en el estadio Nemesio Camacho el Campín el pasado sábado y que tuvo como gran vencedor al conjunto Albiazul con un marcador de 2-0, gracias a lo goles Carlos Andrés Gómez, una de las nuevas joyas del equipo y que se ha convertido en pieza fundamental para Alberto Gamero.

Más allá de lo sucedido en el campo de juego, donde Millonarios fue superior a Santa Fe en la mayor parte del partido, hubo un hecho bastante curioso que se presentó a las afueras del estadio y que tuvo como protagonista a uno de los hinchas del equipo embajador.

En un video que circula por redes sociales y que ha generado bastantes reacciones, se puede ver cómo un aficionado camina con una de las sillas del estadio. Sin embargo, este no pudo cumplir con su cometido, ya que mientras caminaba fue abordado por un policía que terminó quitándosela y evitando que se la robara.

Si bien esto ha generado risas entre los internautas, hay quienes han reaccionado de otra forma, ya que consideran un poco pasiva la reacción que tuvo la policía ante este hecho y, además, que no hubo ningún tipo de sanción a este hincha que, sin duda, generó un daño en un bien público de la ciudad.

Si bien la policía tuvo todo el tiempo para llevar a cabo el debido proceso, este hecho al parecer no tendrá ningún tipo de consecuencias. De momento no se conoce la identidad de la persona y todo indica, según se puede ver en el video, que este aficionado de Millonarios siguió caminando, algo decepcionado, sin problema alguno.

Millonarios sigue sin ceder terreno en el actual torneo y este triunfó lo ratifica como el mejor del todos contra todos de la Liga BetPlay - II. Aunque es el equipo que mejor juega, lo cierto es que aún le queda un largo camino por recorrer para cumplir con el objetivo que se han planteado en las toldas azules, sumar la estrella 16. Una que ha sido bastante esquiva en los últmos semestres al no poder ratificar el gran nivel en los cuadrangulares finales, fase en la que sus rivales lo han superado y dejado sin un final feliz.